Este fin de semana el clima no acompañaba así que tocaba pasar más tiempo en casita. Los peques se desesperan un poco cuando no pueden salir por lo que hemos aprovechado para hacer una nueva manualidad con la que han flipado y se lo han pasado genial: SLIME CASERO.
Tengo que reconocer que nos ha costado bastante dar con la receta. Pero después de varios intentos, ¡¡¡por fin lo hemos conseguido!!! Y es que no sabíamos que el agua endurece la silicona. Ha tenido que ir nuestra hija a lavarse las manos para descubrirlo, ja, ja, ja,…
La receta para hacer slime que hoy compartimos es muy sencilla. Si nosotros lo hemos conseguido, ¡¡tú seguro que también!!
Sólo necesitas…
Silicona líquida (nosotros hemos usado unos 70 ml).
Agua.
Es importante que el agua se vaya agregando poco a poco. Si la añadimos de golpe podríamos pasarnos y la silicona quedaría demasiado dura. Con una consistencia más parecida a la plastilina.
Para darle color únicamente le hemos agregado purpurina (antes del agua). Bastante purpurina. Pero si lo prefieres le puedes agregar colorante alimentario, o colorante alimentario y purpurina,… ¡¡Tú decides!!
Os dejamos el vídeo con los pasos para su elaboración.
Antes de terminar os dejamos un par de consejitos:
Utiliza un cuenco de cristal, la silicona se despega más fácilmente de este material por lo que no sudarás “la gota gorda” al fregarlo…
Guarda el slime tras utilizarlo en un recipiente. De esta manera lo conservarás con su textura original, sin que se endurezca.
Y tú, ¿habías hecho antes slime? ¿Conocías esta receta? Esperamos que te animes a realizarla y, en el caso de que sea así, nos cuentes que tal te ha salido.